Quiero compartir con ustedes la historia de Blanca, una señora de 60 años que me visitó por primera vez hace 4 años y que vi hoy en consulta . En esa oportunidad Blanca consultó para graduarse los lentes, y al tomarle la presión ocular de forma rutinaria, nos encontramos con la desagradable sorpresa de que tenía en el entorno de 30 mmHg de presión en sus ojos.
Hicimos diagnóstico de Glaucoma de Ángulo abierto y afortunadamente el daño en su nervio óptico era mínimo. En ese momento Blanca optó por un tratamiento con gotas que cumplió siempre.
Es una gran satisfacción ver que después de cuatro años de adherencia al tratamiento mi paciente mantiene su visión y campo visual intacto. Comparto su historia con su consentimiento, con la esperanza de que su ejemplo motive a otros pacientes con diagnóstico de glaucoma, que al igual que ella luchan por conservar la visión.